El empresario pesquero Fernando Álvarez Castellano subrayó la urgencia de comenzar la temporada de pesca de langostino a principios de noviembre, advirtiendo que retrasar el inicio hasta finales de mes pone en riesgo la rentabilidad de todo el sector. Durante una entrevista, Álvarez fue claro al señalar que, debido a los altos costos y compromisos financieros de las empresas armadoras, pescar a partir de finales de noviembre no permitiría cubrir los gastos operativos ni cumplir con los aguinaldos y sueldos millonarios que se deben pagar en diciembre. «Si yo tengo que empezar a pescar a final de noviembre, no pesco hasta el año que viene», afirmó.
«Si salimos en noviembre, tenemos que enfrentar el pago de los aguinaldos con solo un mes de trabajo. Y con sueldos de 20 o 30 millones de pesos por marinero, imagínense lo que significa el aguinaldo. Así no hay empresa que aguante»
Álvarez, propietario de Conarpesa, explicó que la coyuntura económica actual hace indispensable arrancar la prospección de langostino cuanto antes, para garantizar una temporada lo suficientemente larga como para hacer frente a todos los costos que enfrentan las empresas. «Empezar en octubre nos permite pescar durante más tiempo y generar los recursos necesarios para pagar los salarios de todos, incluidos los aguinaldos«, señaló. «Si salimos a pescar en noviembre para trabajar solo un mes, los números no dan para nadie. No tiene sentido salir a pescar solo para cubrir un mes y pagar sueldos tan altos», agregó este jueves en entrevista a Radio Chubut.
El empresario también criticó las recientes declaraciones de algunos dirigentes del SOMU, quienes indicaron que el langostino recién estaría disponible hacia fines de noviembre. «No sé desde cuándo ellos tienen la autoridad para decir que la temporada empieza en noviembre. Si esperamos tanto, no vamos a poder sostener la actividad», expresó, recordando que en años anteriores se pescó sin problemas durante octubre.
Álvarez Castellano también advirtió sobre las implicancias financieras de iniciar tarde: «Si salimos en noviembre, tenemos que enfrentar el pago de los aguinaldos con solo un mes de trabajo. Y con sueldos de 20 o 30 millones de pesos por marinero, imagínense lo que significa el aguinaldo. Así no hay empresa que aguante», señaló, dejando en claro que el retraso solo agrava la situación financiera de los armadores.
Por último, Álvarez hizo un llamado a la Secretaría de Pesca para que convoque cuanto antes a la prospección: «Lo que hay que hacer es ir a la prospección. Es llamar a las tripulaciones con el valor de 1200 que se habló y si el SOMU no lo cree conveniente que pare la flota, pero el problema es del SOMU», concluyó.