El Gobierno anunció que decidió «retirar el capitulo fiscal de la ley Bases» para facilitar la aprobación de todo el encuadre legal de desregulación económica propuesto al Parlamento, a la vez que ratificó su meta de alcanzar el «déficit cero».
El sector pesquero argentino recibió con satisfacción los anuncios realizados este viernes por el ministro de Economía Luis Caputo respecto a las modificaciones propuestas para la Ley Ómnibus. En sus anuncios, en vísperas de tratar el proyecto en el Congreso y buscando los consensos necesarios para aprobarlo, Caputo adelantó que no se modificarán las retenciones de las economías regionales, que en el caso de la pesca pasaba al 15%.
Sobre el capitulo fiscal que se retira del proyecto, Caputo dijo que son los puntos vinculados con el «blanqueo, la moratoria, el adelanto de bienes personales, la Ley de Ganancias, las retenciones y el cambio de formula jubilatoria».
Esta declaración representa un alivio para la industria pesquera, que había expresado con enojo sus inquietudes ante la propuesta del nuevo gobierno de Milei.
Aunque la noticia es bien recibida, no aborda completamente las principales preocupaciones del sector. El proyecto de la Ley Ómnibus aún mantiene propuestas controvertidas, como la licitación de cuotas, que continúan generando interrogantes sobre el futuro del caladero argentino. A pesar de este alivio momentáneo, el sector pesquero sigue atento a las discusiones en el Congreso y a la posibilidad de futuras modificaciones que impacten en su actividad.
La medida de retirar el capítulo fiscal fue bien recibida por el gobernador de Chubut, Ignacio Torres: