El Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) anunció este martes el inicio de un estado de alerta y movilización para toda la marinería que integra la flota congeladora de altura y la flota fresquera, en rechazo a lo que calificaron como intentos de las cámaras empresarias por modificar las condiciones salariales y laborales establecidas en los convenios colectivos de trabajo.
La medida fue dispuesta por el secretario general del gremio, Raúl Omar Durdos, y el secretario de Pesca nacional del SOMU, Juan Navarro, y afecta a los convenios vigentes con las cámaras CAPECA, CAPIP, CEPA, CAPA, CAABPA y CAIPA.
Según comunicó el sindicato, la decisión se tomó ante la falta de avances en las negociaciones salariales y frente a la postura de las cámaras pesqueras, que “mediáticamente informaron” su intención de no despachar a la flota tangonera langostinera (congeladores y fresqueros) para presionar una reducción de los valores de producción establecidos en los convenios colectivos.
Desde el SOMU denunciaron que los empresarios buscan “extorsionar” al gremio y a los trabajadores para imponer una rebaja salarial sin haber presentado formalmente un procedimiento preventivo de crisis ante el Ministerio de Capital Humano, ni documentación respaldatoria ante la Secretaría de Pesca de la Nación.
En el comunicado, también señalaron que no existe hasta el momento ningún balance económico que justifique la presunta crisis alegada por las cámaras, y recordaron que durante 2024 el precio promedio de exportación del langostino rondó los 6.000 dólares por tonelada.
Finalmente, el SOMU convocó a toda la marinería a reunirse el próximo martes 21 de mayo a las 11 horas en sus respectivas seccionales y delegaciones, con el objetivo de coordinar acciones y definir los próximos pasos frente al conflicto con el sector empresarial.