Con el inicio del año, el calamar Illex vuelve a ser protagonista en las aguas argentinas. Desde el 2 de enero, la flota nacional comenzó a operar en etapas, con habilitaciones progresivas que permitieron a los buques adaptarse a las concentraciones del recurso, hasta llegar ahora con la totalidad de la flota operativa.
Los primeros movimientos de la temporada se concentraron en la región sur-patagónica, específicamente entre los paralelos 49°S y 52°S, donde varios buques iniciaron operaciones exploratorias. Desde el 7 de enero, la habilitación se extendió al sur del paralelo 44°S, y, finalmente, desde el 12 de enero, la totalidad de la flota nacional quedó autorizada a operar. Este despliegue incluye buques de bandera argentina y otras embarcaciones con intereses mixtos, que fueron zarpando desde puertos estratégicos como Mar del Plata, Puerto Deseado y Comodoro Rivadavia.
Actualmente, la flota trabaja en dos áreas principales. Una concentración de buques opera cerca de Puerto Deseado, mientras que la otra, más numerosa, se encuentra en una franja al norte del Golfo San Jorge. Las capturas iniciales indican una predominancia de calamares de talla SS y S, con rendimientos variables que en algunos casos superan las 40 toneladas diarias.
El desafío radica en mantener la sostenibilidad del recurso y garantizar un equilibrio entre la oferta y la demanda, en un contexto global donde la competencia es cada vez más intensa.
Con la temporada recién iniciada, las expectativas son altas. Si los buenos rendimientos se mantienen y la gestión pesquera sigue siendo efectiva, la zafra del calamar Illex argentinus 2025 podría consolidar a Argentina como uno de los principales actores en la pesca del Atlántico Sudoccidental.